El origen de la sociedad de Couillet se remonta a una ferrería construida en el año 1600 por Theodore Le Bon. Esta primitiva instalación aprovechaba el caudal del rio Couillet para accionar sus fuelles y martinetes. En 1764, los talleres de Couillet contaban con fundición, fanderia para laminación y las instalaciones precisas para la fabricacion de hoja de lata. En 1821 fue dotada de hornos de pudelaje y el primer alto horno se instaló en 1829. En 1835, la antigua sociedad comanditaria se transformo en Société Anonyme des Hauts Fourneaux, Usines, et Charbonnages de Marcinelle et Couillet. Entre 1835 y 1846, la empresa inició un proceso de expansión con la adquisición de minas de carbón (Charbonnages de Marcinelle et du Carabinier) y otras instalaciones siderúrgicas (Usine sidérurgique des Hauchies, Atelier Tassin). En 1848, se introdujo en el mercado ferroviario con la construcción de una locomotora para los ferrocarriles del Estado Belga. Su primera exportacion parece ser a la república mexicana en 1850 con la 210 "La Mexicana". Las primeras exportaciones en España de realizaron en 1863, con el suministro de cuatro locomotoras al Ferrocarril de Ciudad Real a Badajoz. En 1870, la empresa fusiona con la Société Anonyme des Hauts-Fourneaux, Mines et Charbonnages de Châtelineau y adquiere las sociedades carboneras de Klopp y Rodange, en Luxemburgo. La empresa amplia sus instalaciones, poniendo en marcha en 1888 una acería Siemens-Martin, y una acería Thomas en 1892. En 1906 se procedió a la separación de las actividades mineras de las siderurgicas, pasando estas ultimas a denominarse Société Anonyme des Usines Métallurgique du Hainaut (UMH). En 1955, se fusionó con la Société Anonyme Métallurgique de Sambre et Moselle, formando la nueva sociedad Société Métallurgique Hainaut-Sambre. En 1981, se con la sociedad John Cockerill, constituyendo el complejo industrial Cockerill-Sambre.
Couillet construyó entre 1849 y 1951 un total de 1826 locomotoras (146 para España)